lunes, 7 de julio de 2014

Alhaurín despierta (II) Donde estamos.

La foto de la política institucional alhaurina en la actualidad es un "selfie" de nuestro Alcalde.
Todo lo que ocurre a nivel institucional tiene su sello personal. Eso lo saben sus adversarios, pero sobre todo sus afines y lo tienen meridianamente claro los que se benefician de sus políticas.

Esta situación llevó no hace mucho a que el nuevo servicio informatizado del registro de entrada en el ayuntamiento, solo durase unos días en funcionamiento. D. Joaquin lo mandó desactivar al comprobar que enviaba directamente cada documento al área correspondiente, sin pasar por su ipad. No podía permitir perder el control, no se fía de sus colaboradores, ni del propio trámite oficial. De hecho en el último pleno, reconoció en público, ante una reclamación del presidente de una plataforma ciudadana que había solicitado una cita por registro, que ese no era el trámite para todos, sino que para según que asuntos, debía ponerse en la puerta de su despacho o pedirle un hueco a su secretaria.
Igual pasa con las iniciativas empresariales, urbanisticas, comerciales, deportivas, vecinales, sociales o culturales: Dependiendo de su interés tiene uno u otro procedimiento y un lugar privilegiado o no en su agenda.
Todos saben en Alhaurín que determinados constructores, promotores o canteros tienen via directa y "tramite abreviado" en el Ayuntamiento. Que determinadas asociaciones y colectivos tienen subvenciones, espacios públicos y apoyo institucional sin límite, frente a otras que son discriminadas y marginadas, según el grado de incomodidad que generen. Que no pocos presidentes o responsables de estos colectivos forman parte del entramado de relaciones que controla el Ayuntamiento. Y si alguien se desmadra, se le acusa de traidor o se le castiga sin financiación municipal, como le ocurrió al presidente de una asociación de vecinos que osó presentar alegaciones al presupuesto general de este año pidiendo saneamiento y arreglos para su barriada.
Todos sabemos que el acceso al empleo temporal en el Ayuntamiento, pese a la bolsa de trabajo que tanto costó implantar sigue teniendo puertas traseras. Que los ascensos y promociones se otorgan a los afines. Que sigue habiendo enchufados y mantenidos a los que se devuelven favores o silencios, como el gerente de la fantasma Fundación de las Canteras, los cargos de confianza o los enviados desde otros lugares que cobran sueldo sin función conocida. Que las relaciones personales, familiares, políticas y económicas están por encima del derecho de todos los alhaurinos a ser tratados por igual por nuestro Ayuntamiento.
Esto unido al constante desprecio de cualquier propuesta o idea que se distancie del modelo productivista y ladrillista que colocó y mantiene en sus asientos a D. Joaquín y los suyos, ( me refiero a algunos de los concejales y funcionarios, no a todos por supuesto) y que pretenden que continúe en forma de ciudad aeroportuaria, campos de golf o urbanizaciones mastodonticas, despreciendo los límites ecológicos y racionales de nuestro entorno, son realidades innegables en nuestro pueblo, pero también oportunidades y motivos.
Son los argumentos, las causas que van a llevar a la gente, a los ciudadanos de Alhaurín de la torre que sufren y rechazan estas formas, a rebelarse y a quitar de las posiciones de privilegio y poder a estos representantes de lo privado que ocupan asientos públicos.
Paradojicamente las mismas razones que han separado a los ciudadanos de las instituciones y de cierta forma de practicar la política, van a ser las que animen a esa ciudadanía a reclamar esas plazas, a demostrar que la política puede ser la solución a los problemas si se practica desde la ciudadanía.
Para eso hay que despertar, como lo está haciendo mucha gente en muchos sitios.
En breve despertará Alhaurín.

Juan Manuel Mancebo Fuertes
Concejal y portavoz de ELECTORES,
Alhaurín de la Torre. 




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